Dí a mi pueblo que marche.
Se le llama encrucijada a una situación difícil o comprometida en que hay varias posibilidades de actuación y no se sabe cuál de ellas escoger. Es allí donde la habilidad de tomar decisiones se pone a prueba y donde los consejos y opiniones llegan desde diversos lugares, en muchos casos generando desconcierto sin saber cuál voz escuchar. Pero hay otra situación aún mucho más compleja que la encrucijada, donde no existen posibles decisiones sino un callejón sin salida, un gran